Central de Recursos Online AMIA | Colonización Judía en Argentina

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Montefiore

Ubicada al noroeste de la provincia de Santa Fe, Montefiore fue establecida por la Jewish Colonization Association (JCA) en 1912, con familias procedentes de otras colonias que aún no poseían sus propias tierras. Su nombre rendía homenaje a Moses Montefiore (1784-1885), un importante banquero y filántropo judeo-inglés. A fin de asegurarse la perdurabilidad del asentamiento, y considerando las experiencias acumuladas a lo largo de veinte años de actividad, en este caso la compañía previó la construcción de casas de ladrillo con techos de zinc y proveyó a las familias de cuatro escuelas rurales. No obstante, la gran inundación que anegó la colonia en 1914, sumada a otros inconvenientes climáticos, obligó a gran parte de los primeros colonos a emigrar a la ciudad vecina de Ceres, o bien a la promisoria zona algodonera del Chaco, por lo que el número de familias se redujo tempranamente, pasando de doscientas sesenta a tan solo treinta. Sin embargo, entre 1925 y el inicio de la Segunda Guerra Mundial llegaron nuevos contingentes de inmigrantes provenientes de Lituania, Polonia y Rumania que revitalizaron la vida en la colonia. Para entonces, las inclemencias climáticas y las invasiones de langostas habían decidido a la JCA a considerar los reclamos de los colonos, quienes solicitaban la ampliación del tamaño de los lotes a fin de tornarlos económicamente sustentables. La última de esas ampliaciones, que paulatinamente llevaron las parcelas de setenta y cinco hectáreas a ciento cincuenta, fue concedida en la década del cincuenta.

Las principales actividades agropecuarias desarrolladas en esta zona fueron el cultivo de forrajes (alfalfa y sorgo), lino y maíz, el engorde de ganado vacuno y la industria lechera (tambos y cremerías), mientras que La Fraternal Agraria fue la cooperativa local más destacada.

La colonia estaba dividida en grupos de lotes denominados La Criolla, La Elsa, La Marina, Selva y Tostado. Algunas de las instituciones que dieron brillo a la vida sociocultural fueron el Hogar Social Claudio Montefiore y el Salón Louis Oungre, que proyectaban cine, producían obras de teatro y organizaban conferencias y bailes populares. En la vecina localidad de Ceres, donde se arraigó una numerosa colectividad, desde 1920 se publicó el bisemanario en ídish Dos Fraie Vort (La voz libre). En la actualidad, esa comunidad aún mantiene en actividad el cementerio.